La presencia de población inmigrante en Andalucía enriquece la diversidad cultural de nuestra región.
Las políticas muy restrictivas en el cierre de fronteras de los países, provoca terribles consecuencias en la vida las personas inmigrantes.
La mujer que migra sufre una doble discriminación: Por el hecho de ser mujer y por el hecho de ser inmigrante.
La inmigración en el ámbito educativo, entre otros beneficios, fomenta valores de cohesión respeto y enriquecimiento cultural de los alumnos.
La sociedad andaluza debe abordar el fenómeno de la inmigración desde el mestizaje.
No debe de darse un trato diferente a los inmigrantes. Todas las personas deben de tener los mismos derechos.
Inmigración no es igual a trabajo precario o poco cualificado, ya que en muchos casos la población inmigrantes tiene un nivel de formación muy superior al trabajo que realizan.
Desde el punto de vista económico, a mayor número de inmigrantes regularizados, mayor será el volumen de ingresos en forma de impuestos que se genera un pais.
Las campañas de sensibilización nos hacen conocer y entender la cultura de la población inmigrante.
Para conseguir una sociedad más justa e igualitaria debemos comprometernos todos, tanto políticos como ciudadanos.